¡Hola Tranceros! Bienvenidos a una nueva reseña en el blog, el día de hoy les compartiré una historia que tenía muchísimas ganas de leer y que fue de mis libros más esperados del año pasado, he de admitir que me costó mucho leer este libro y les contaré mis razones. Hablemos de Luna de Hueso (La Nación de las Bestias #3) de Mariana Palova
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¡Gracias a Editorial Océano por el ejemplar!
«Soy Él. El descabezado.
Soy Él, el que abre las puertas de este mundo y del otro.
Soy el Martillo que revienta a los espíritus.
Yo soy… la Bestia Revestida de Luna».
¿Por qué más valdría la pena luchar, si ya has perdido
todo lo que alguna vez juraste proteger? Tras los fatídicos eventos ocurridos
en Stonefall, y con su vínculo con Comus Bayou destrozado, Elisse se encuentra
más herido que nunca, abandonado frente al monstruo que poco a poco comienza a
apoderarse de él.
Decidido a encontrar una forma de liberarse de su poder
antes de que sea demasiado tarde, el joven contemplasombras se adentrará en un
peligroso viaje a través de las heladas tierras del norte de los Estados Unidos
en busca de los orígenes de la criatura. Pero al ser arrastrado hacia la neblinosa
costa de Salem, la tierra de las brujas, Elisse se encontrará con una nueva
magia, tan oscura y a la vez, tan seductora, que pondrá a prueba los últimos
vestigios de su espectro humano. Una magia que, quizá lo convenza por fin de
dejarse devorar por la oscuridad.
Bienvenidos de nuevo a nuestra Nación.
¿De qué trata este libro? Luna de Hueso es la tercera, o cuarta como se quiera ver, entrega de la saga de la Nación de las Bestias, en está ocasión acompañaremos a Elisse y todo su grupo a un viaje lleno de obstáculos que los llevará no solo a enfrentar su mayor desafío, si no a descubrir algunas verdades profundamente enterradas e increíblemente poderosas, además de, finalmente, poder encontrar quiénes son realmente. Desde el inicio y tras el enfrentamiento con el que finaliza el segundo libro, nos encontramos con un Elisse que cada día más se encuentra a merced del misterioso monstruo de hueso que habita en su interior, además de que su relación con Tared cada día se destroza más, con ambos solos, heridos y perdidos en las heladas tierras de Estados Unidos ambos tratan de encontrar respuestas a las preguntas que los atormentan, especialmente, ¿Quién es el misterioso y macabro ser que habita dentro de Elisse? Sin embargo, a veces las respuestas no son lo que esperamos y es mejor vivir con las dudas que estas generan…
“…Pero eso nunca me importó.
Ni a mí ni a los espíritus que dominé al paso de los años. Porque, para ser una
buena bruja, no hace falta ser una buena mujer…”
He de admitir que odié y amé este libro a partes iguales y que sentarme a escribir esta reseña me cuesta muchísimo trabajo porque no estoy segura de qué decir. Ha sido una montaña rusa de emociones en que tuve que pausar la lectura en varias ocasiones, les juro que tarde más de dos meses en terminar el libro, y aunque soy gran fan de esta saga si me encontré con algunas cosas que no disfruté tanto pero que al final tuvierón mucho sentido. Uno de los aspectos más negativos que me topé con el libro es lo lento que es el inicio, aunado esto a que durante los meses pasados me enfrente a un episodio de depresión muy fuerte que no ayudo a que conectara con cualquier lectura, Mariana logró espectacularmente una experiencia inmersiva donde el lector se siente como los personajes, pero llegó un punto en que estaba llegando a la mitad del libro y yo sentía que no estaba pasando nada, ahí fue donde decidí pausar la historia y retomarla más adelante que me sintiera mejor anímicamente pues, honestamente, me estaba afectando a un nivel emocional, la tristeza de los personajes, la rabia, la soledad, yo podía sentirlas en mí misma y toda la atmósfera invernal, helada, fría y solitaria no ayudaban a que esto mejorara. Una vez que retome la lectura me fue muchísimo más fácil avanzar pues todo comenzó a cobrar sentido y la historia comenzó a fluir de muy buena manera, y entonces entraron en acción nuevos personajes que rápidamente se apoderaron de mi corazón y que hicieron que la historia, que hasta ese momento se sentía estancada, comenzará a fluir hasta agarrar un ritmo en el que ya me era imposible dejar de leer. Ignoro si este ritmo sea intencionado, pero, aunque al principio no me gustaba, al final lo agradecí, porque si todo el libro hubiera sido tan fluido como la segunda mitad, me habría perdido muchos detalles y muchos matices de los personajes y de la historia.
“…Siempre he creído
que el remordimiento es una buena vara para medir qué tan nobles somos en
realidad…pero tarde o temprano, todas las heridas se vuelven cicatrices, aunque
a veces quieras abrirlas de nuevo. Y, al final, uno debe aprender a vivir con
ellas, no esperando a que el dolor se desvanezca, sino al permitir que te pasen
otra vez las cosas buenas…”
Quisiera hablarles más a profundidad de este libro, hablarles del sistema de magia que me pareció sumamente interesante o de los nuevos personajes, los giros de la historia y el final, en serio que ese final no tiene perdón alguno. Pero no puedo, porque les haría spoiler y les quitaría la oportunidad de conocer esta historia por la que valió la pena esperar tantos años. Por ahora solo diré que muero por leer el cuarto libro de esta saga y que espero y deseo de todo corazón que no tarde tanto en llegar a nuestras manos, ya que Luna de Hueso es una historia llena de magia y misticismo, pero también es una historia de poder, amor, traiciones y personajes, es un libro al que debemos tenerle paciencia pues tarda un poco en arrancar, pero una vez que lo logra es imposible dejar de leerlo, de momento se ha convertido en uno de mis libros favoritos de la saga. Oscuro, maravilloso, mágico, misterioso y desolador, esa es la mejor forma en que puedo describir este libro y sin duda alguna, una muy buena lectura.
¡Felices Lecturas!
